Buenos Aires. El Gobierno salió ayer a cuestionar el crítico documento de la Iglesia Católica, en el que los obispos expresaron su preocupación ante el riesgo de que la Argentina caiga en nuevas divisiones con “bandos irreconciliables”.
El ministro de Educación, Alberto Sileoni, rechazó el manifiesto episcopal al asegurar que no ve “una profunda crisis nacional, ni una profunda crisis educativa, ni una adolescencia angustiada”.
Al respecto, el documento de la Conferencia Episcopal Argentina había expresado su “honda preocupación por los jóvenes, la educación, la drogadicción y la intromisión partidaria en las escuelas”.
“No vemos una profunda crisis nacional, ni una profunda crisis en la educación ni una adolescencia angustiada”, refutó Sileoni en el acto de apertura de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo, junto al ex ministro Daniel Filmus, el economista Bernardo Kliksberg y jefe de la cartera educativa de Uruguay, Ricardo Erlich.
“A nadie le importa”. En tanto, el vicepresidente Amado Boudou evitó responder e ignoró el informe de los obispos, cuando fue consultado por el diario La Nación : “¿Qué documento? A nadie le importa”, sostuvo Boudou
La misma actitud tuvo el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, cuando fue consultado después de que entregara a los medios en la Casa Rosada un parte médico con un cuadro de lumbalgia que le diagnosticaron a la jefa del Estado.
Por su parte, el senador Aníbal Fernández minimizó las advertencias que planteó la Iglesia y consideró: “parece que hay vocación de presentar el documento antes del 7 de diciembre”, fecha en la que vencerá la medida cautelar que frenó la aplicación de dos artículos Ley de Medios cuestionados por su inconstitucionalidad.
“¿Qué hace el documento de la Iglesia en este día? Parece que hay vocación de presentarlo previo al 7 de diciembre porque siempre lo hicieron después, no entiendo qué es eso”, señaló el exjefe de Gabinete en declaraciones a Radio 10.
Fernández apuntó duramente contra los obispos que ayer emitieron una dura declaración al sostener: “Parece que son los que están a la vera del riacho diciéndoles a los que están en el barco que remen”.
Desde la oposición. El senador radical Ernesto Sanz afirmó, en tanto, que el documento difundido por la Iglesia “puso el dedo en la llaga en una de las peores herencias del kirchnerismo” que es la “división de la sociedad” y acusó al vicepresidente Amado Boudou de “ignorar la realidad”.
Sanz lamentó el “comentario despectivo” que realizó el vicepresidente sobre el texto de la Iglesia, porque “ignora la adversidad” y aseguró que el Gobierno “le pega un cachetazo a la realidad, con rencores, resentimientos y odios”.
El senador se refirió además a los “hechos artificiales creados por el gobierno” y citó como ejemplo los dichos de la presidenta Cristina Fernández sobre los “caranchos y buitres” con los que “deslegitima el reclamos que deben hacer los jubilados por su propia culpa”.
“La Iglesia puso el dedo en la llaga en una de las peores herencias que deja el kirchnerismo, que es dividir la sociedad”, aseguró Sanz desde la provincia de San Juan tras un acto con militantes de su partido.
La diputada de Unión por Todos Patricia Bullrich aseguró que las expresiones del vicepresidente Amado Boudou sobre el último documento de la Iglesia Católica implican que “hay un Gobierno que no quiere escuchar”.
En un comunicado, Bullrich señaló que el problema “es recurrente porque si sale la gente a la calle y hay una oposición, no la quieren escuchar, si la Iglesia opina que hay problemas de libertad de expresión, no la quiere escuchar”.
Preocupación compartida. A todo esto, el titular del Frente Amplio Progresista, el socialista Hermes Binner, aseguró que mantiene “preocupaciones comunes” con la Iglesia e instó a “recuperar el diálogo” como “instrumento” para resolver diversas problemáticas que atraviesa el país.
Luego de la declaración que difundió la Iglesia donde alertó sobre nuevas divisiones en el país con “bandos irreconciliables”, Binner convocó a “recuperar el diálogo como instrumento para la resolución de nuestros problemas” porque, puntualizó, “es el camino que debemos retomar”.
“En el documento de la Iglesia argentina dirigida a sus fieles con motivo de la Navidad, encontramos preocupaciones comunes”, manifestó el ex gobernador de Santa Fe.
En ese sentido, enumeró: “El avance de la droga y el narcotráfico, la situación de la juventud, sobre todo el clima de división de la sociedad argentina, que observamos en esta polarización del blanco o negro”.
Lo que dijo el documento
Divisiones. “A casi 30 años de la democracia, los argentinos corremos el peligro de dividirnos nuevamente en bandos irreconciliables”.
Caudillos. “El excesivo caudillismo atenta contra el desarrollo armónico de las instituciones”.
Justicia. “Esto es particularmente delicado, cuando se trata de la independencia del Poder Judicial”.
Libertad. “Hay presiones que inhiben la libre expresión”.
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