Un niño de segundo año de primaria estuvo a punto de perder uno de sus testículos tras ser golpeado por un compañero de clase en un nuevo caso de bullying en Puebla.
Tras ser golpeado, el niño permaneció casi cuatro horas doliéndose en clase y llorando. Le comunicó a su profesora el dolor, pero ella le contestó que no quería "niños chillones".
Según el diario Milenio, el menor fue golpeado en el baño de la escuela República Argentina del municipio de San Martín Texmelucan. Tuvo que ser enviado al hospital, donde fue operado y estuvo internado durante una semana.
Anita García Salazar, madre del niño, dijo a Milenio que los padres del niño agresor solo cubrieron la intervención quirúrgica en el hospital, y no las terapias, ni las consultas y medicamentos que requiere todavía su hijo.
"Niños chillones"
La mujer contó que el día de los hechos, cuando fue a recoger a su hijo a las 13.00 horas, la maestra Delia Ramírez Cante le comentó que su hijo estaba llorando debido a que alrededor de las 9:00 de la mañana se había peleado en los baños con uno de sus compañeros.
Según la madre, la maestra le había dicho a su hijo "que niños chillones no quería dentro del salón, que si seguía chillando me lo iba a sacar para fuera".
Tras darse cuenta de la lesión, llevó a su hijo al centro médico, y al día siguiente a un hospital particular.
"La verdad no sabían los doctores si había explotado su testículo y el otro se lo habían subido más, por el fuerte golpe que le dieron a mi hijo" explicó.
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