El gobernador José Manuel De la Sota reconoció ayer que para el año próximo prevé aumentos en los impuestos. La suba alcanzará a los contribuyentes del Inmobiliario Urbano, Rural y Automotor, y se calculará en función del índice de inflación elaborado por consultoras privadas, que oscila entre un 30% y un 40%. Además, se tomará en cuenta el revalúo de las propiedades de mayor valor.
“Estamos viendo cuál va a ser el aumento”, afirmó el gobernador a Cadena3, reconociendo la inminente suba. En el marco del acto de inauguración de una rotonda en la ruta E-55, De la Sota apuntó al Gobierno nacional, responsabilizándolo por los índices de inflación. Lo que no aclaró el gobernador es por qué tomará como referencia las cifras que elaboran empresas privadas como las consultoras, que carecen de una estructura suficiente para realizar relevamientos confiables, en base a muestras relevantes y que suman al clima de especulación en relación a los precios. El denominado “índice Congreso” maneja cifras que rondan el 40% de inflación interanual, lo que sería traducido a la suba en los impuestos.
El último aumento en la carga impositiva, aplicado a principios de este año por el Gobierno provincial, promedió un 28%. En aquella oportunidad no se tocaron los Ingresos Brutos.
En cuanto al Impuesto Automotor, será el más sensible a los aumentos impositivos anticipados desde el gobierno provincial para 2015. Los valores se modificarán en base al comportamiento de los precios de los automóviles, tomando en cuenta los datos elaborados por la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara). Según anticipó el diario Comercio y Justicia, “las subas de este impuesto oscilarán entre el 40% y el 100% en algunos casos”, según el tipo de vehículo.
Aunque De la Sota evitó referirse a los Ingresos Brutos, fuentes gubernamentales indicaron que este último no exhibirá aumentos. Sin embargo, sí se retocará el mínimo no imponible para las alícuotas correspondientes a algunos impuestos. “Habrá correcciones que tiene que ver con la modificación, por la inflación, de la base imponible de los bienes”, explicó el gobernador.
Amplían descuentos para comercio e industria
En el marco de un acta acuerdo sobre política fiscal que firmó De la Sota, acompañado por los ministros de Finanzas, Ángel Elettore y de Industria, Comercio, Minería y Desarrollo Científico-Tecnológico, Martín Llaryora, con la Federación Comercial de Córdoba (Fedecom) y la Cámara de Comercio de Córdoba (CCC), se fijó la ampliación del beneficio de la rebaja del 30% de las alícuotas.
En esa línea, se dispuso que la sumatoria de los ingresos acumulados del ejercicio fiscal anterior se incremente de $2.340.000 a $3.042.000 y de $4.680.000 a $6.084.000; lo cual implica que más contribuyentes podrán acceder a la disminución. “Con esta medida los contribuyentes ubicados en esta franja mantienen la alícuota general reducida del 2,80% o la que corresponda para actividades especiales”, informaron desde la Provincia.
Además, se definió que “los industriales de Córdoba seguirán exentos del impuesto cuando tengan ingresos de hasta $46.800.000 anuales en 2014”.
Rechazo rural
Los anuncios sobre la suba impositiva ya cosecharon rechazos del sector agropecuario local. “En esta no lo acompañamos, los productores han perdido rentabilidad y el gobernador tendrá que buscar plata en otro lado”, dijo Marcos Giraudo, de Coninagro, en declaraciones a los medios locales.
Por su parte, Agustín Pizzichini, de la Federación Agraria Argentina en Río Cuarto, afirmó: “Nuestras bases no pueden pagar un incremento de ningún tipo”.
De esta manera, quedó claro el rechazo de la Mesa de Enlace local a los aumentos en el inmobiliario rural. Así lo manifestaron los productores en el marco de la mesa de diálogo que conforman con el Ministro de Agricultura provincial, Julián Lopez.