Se ensucia la campaña electoral hacia la Presidencia en Argentina

El tono de la campaña política con miras al balotaje del 22 de noviembre en Argentina comienza a subir. Compararon a Mauricio Macri con el ministro de Economía de la dictadura, lanzaron una campaña en su contra en Twitter y hasta se rumorea que el oficialismo contrató a un experto en batallas sucias. El macrismo asegura que todo eso "no va a funcionar".

La que se convirtió en acción de campaña más comentada de esta última carrera entre Macri y Daniel Scioli no fue una propaganda tradicional sino una encubierta. Se trató de la transmisión, apenas comenzó el bloque de publicidad en el entretiempo del partido que daría el campeonato de primera división a Boca el domingo, de un "adelanto" del programa que se podría ver más tarde en "6, 7, 8", un programa que milita a favor del gobierno.

Desde el punto de vista del objetivo deseado, la propuesta fue completa: en ese momento la transmisión alcanzaba los 20 puntos de rating, el espacio fue el primero de la tanda y ni siquiera tuvo que ser pago por la campaña de Scioli, pues no era un spot de su equipo. Y lo vio mucha más gente que la que luego siguió el programa promocionado, que marcó 6,7 puntos al comienzo.

"Los grandes grupos económicos versus los intereses de la gente", es la primera frase que se escucha en el spot, que dura cerca de tres minutos y compara las propuestas de Macri con las políticas impulsadas en su momento por José Alfredo Martínez de Hoz, ministro de Economía de la última dictadura militar.

"Treinta y seis años pasaron del discurso de Martínez de Hoz, 36 años, increíble", concluye el espacio.

El sábado por la noche, en la transmisión del partido entre Belgrano y Estudiantes, también hubo una acción publicitaria en el contexto de una transmisión de un partido de fútbol. Esta vez fue más encubierta, pues fue el mismo relator el que quiso hacer pensar a sus oyentes en pleno encuentro. Tras comentar una jugada, agregó: "Fútbol para todos, abierto y gratuito. ¿Vas a volver a pagar para ver? Pensalo bien. ¿Vas a volver a pagar para ver las tribunas?", y continuó con un pase de Espíndola López.

En las redes sociales también hubo campaña. La lanzaron los militantes con la etiqueta "Si Macri gana", a la que agregaban mensajes de cosas negativas que ocurrirían en el país. la campaña se volvió en contra, pues tuvieron más resonancia los mensajes que se reían de ella, como "Si Macri gana nazis montados en dinosaurios van a invadir Argentina, empezando por Bariloche", o "las caderas de Shakira sí van a empezar a mentir".

Aníbal Fernández, jefe de gabinete y recién derrotado en su aspiración a gobernador de la provincia de Buenos Aires, defendió esta campaña en su conferencia de prensa de ayer de mañana. Argumentó que los oficialistas cuentan lo que los opositores quieren hacer, y que eso no está mal.

"¿Decir la verdad es meter miedo? Vean la explicación de Martínez de Hoz, y la explicación de los economistas de Macri y son exactamente iguales".

"Un hombre de mi propio partido dijo hace mucho que si contaba lo que iba a hacer no lo hubiesen votado. Bueno, nosotros queremos contar qué es lo que ellos piensan hacer. Si lo quieren votar, que lo voten, pero nosotros lo vamos a contar", indicó.

¿Experto en campañas sucias?

Y la situación se enrarece más ante el rumor de que estuvo en Argentina João Santana, el brasileño experto en campañas sucias que habría asesorado a Scioli para esta etapa final.

Infobae y La Nación confirmaron esto, pero el candidato y sus asesores lo negaron. La verdad tal vez solo se conozca en el devenir de la campaña, cuando se vean o no las recomendaciones que según los informantes habría dado el brasileño a los sciolistas.

El principal consejo habría sido el de intentar identificar a Macri con un ajuste económico salvaje e instalar el miedo de que, si él gana, la gente de a pie perderá los beneficios alcanzados con el kirchnerismo. Macri sería el regreso del neoliberalismo de los años 90.

Macri mira hacia adelante

Macri es consciente de lo que sucede y lo aclaró en su cuenta de Facebook, donde adelantó que "no va a funcionar".

"A pocos días del balotaje, el oficialismo despliega ahora una estrategia oscura de llenar de pesadumbre y de miedo a la población, con el único objetivo de asustarlos ante la posibilidad de cambiar", comentó.

Y siguió con un mensaje optimista: "Ya sentimos el olor del aire fresco. Ya sentimos la felicidad que da la proximidad de un nuevo comienzo", y más frases similares. Quedan 20 días.

Las encuestas mantienen a Macri como favorito

Al día siguiente de la primera ronda, una primera encuesta dio una ventaja a Mauricio Macri frente a Daniel Scioli de cara al balotaje. En los últimos días otras dos consultoras advirtieron del mismo escenario.

El primer sondeo, de González y Valladares, asignaba 52,35 % al opositor y 47,65 % al oficialista.

Pocos días después, Elypsis difundió su estudio, donde amplió la diferencia. Macri figura primero con 56,3 % frente al 43,7 % de Scioli. Los analistas de esa empresa indicaron que, de los que votaron al candidato del Frente para la Victoria el pasado domingo, solo 71 % volverá a hacerlo.

Este fin de semana se conocieron unos terceros resultados, también en la misma línea. Según Polldata, Macri triunfaría con 55,9 % y Scioli lo vería de lejos, desde el 44,1 %.

La clave está en el reparto de los cinco millones de votos de Sergio Massa. Según Polldata, el candidato de Cambiemos lograría quedarse con el 55,1 % de esos sufragios, mientras que el exponente del Frente de la Victoria acogería el 34,7 %. Casi 6 % sería de votos en blanco o nulos, y lo demás (4 %) corresponde a quienes aún no lo han definido.

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