El entrenador de la Selección argentina Alejandro Sabella jugó a las escondidas esta mañana con el equipo titular, en la última práctica en Belo Horizonte previa al viaje a Porto Alegre, donde enfrentará a Nigeria, en el cierre del Grupo F.
El plantel realizó trabajos intensos en lo físico junto al profe Pablo Blanco y, al menos desde el lugar de espionaje de la prensa en el morro del barrio Jardim da Gloria, no se vio ningún indicio de los posibles once jugadores de arranque.
Una de las especulaciones es el ‘cuidado‘ que Sabella haría con Marcos Rojo, el único amonestado y que de recibir otra amarilla se perdería el choque de octavos de final.