La secretaria gremial de la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra), Sandra Maiorana, exigió que se mejoren las condiciones de seguridad dentro de los hospitales públicos de Rosario y pidió que se instale un detector de metales en el ingreso de los centros asistenciales.
La propuesta fue descartada de plano por la Municipalidad de Rosario. “Los detectores de metales en las guardias de los hospitales potenciarían mayores situaciones de violencia”, consideró el secretario de Salud Pública de la Municipalidad, Leonardo Caruana. La polémica se originó luego de que el fin de semana pasado irrumpiera al hospital Carrasco un grupo de personas que acompañaban a cuatro jóvenes que habían sido víctimas de heridas de arma de fuego. Estas personas empezaron a gritar y a golpear las puertas. Uno de los familiares rompió un vidrio de un puñetazo. La violencia se trasluce todos los días en las historias de tensión que enfrentan los trabajadores de los hospitales.
Caruana no se mostró partidario de incorporar los detectores de metales tal como lo reclamó la Asociación de Médicos de la República Argentina. “Estamos trabajando con el sindicato municipal, que es el que más participa en estos espacios de diálogo de cada hospital para seguir abordando las situaciones de violencia en las guardias. Cada centro de salud ha adquirido elementos. Hoy todos los hospitales tienen videocámaras, personal de Control Urbano, tienen protocolos de trabajo para el ingreso y egreso de pacientes. Y no hemos valorado nunca la utilización de detectores de metales como una alternativa que atenúe una situación potencial de conflicto”, remarcó Caruana.