Si la Corte Suprema de los Estados Unidos, la última instancia que le queda a la Argentina, no toma el caso -lo que podría suceder-, entonces se aplica el fallo del juez Thomas Griesa y el país deberá pagar el 100% de lo demandado por los buitres (U$S 1.330 millones), indicaron los especialistas.
El país tiene un vencimiento de deuda el 2 de diciembre (U$S 47 millones del Global 2017) y -si no paga entonces a los buitres- entrará en default técnico.
Para los expertos, las posibilidades de que el Alto Tribunal acepte el caso no son altas. Es que sólo se pronuncia sobre el incumplimiento de delitos federales y el único de ellos que se estaría violando en este caso sería sobre el Acta de Inmunidad Soberana Extranjera.
Mientras tanto, economistas coincidieron además en que existe una alta probabilidad de que la Argentina, si la Corte Suprema de los Estados Unidos acepta al final el caso, no consiga de todos modos un fallo favorable en el juicio que tenedores de bonos impagos le hicieron al país para cobrar 100% de sus tenencias, por lo que el tema se convertirá en un problema político en el corto plazo.
El economista Orlando Ferreres consideró que el gobierno de Cristina Fernández apunta a que la cuestión de la deuda en default se resuelva después de 2015.
“Creo que vamos a tener que pagar de alguna manera, seguramente una parte”, señaló Ferreres quien dijo que “el Gobierno está tratando que eso pase para después de 2015”.
“Esto va a ser un problema político que tendrá implicancia en un año y medio”, dijo en relación a los plazos en los que la Corte estadounidense puede decidir si Argentina tiene que pagar o no.