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La ozonoterapia es una técnica que utiliza como agente terapéutico al ozono, tanto por su capacidad antioxidante como de cicatrización.
Este tipo de terapia, que generalmente es utilizada en centros de belleza estética, consiste en aplicar 95% de oxígeno y 5% de ozono por medio intravenoso o superficialmente sobre la piel.
La ozonoterapia también es utilizada para bajar de peso y reducir tallas. Para este fin la persona ingresa a una cápsula térmica, que contiene una mezcla de oxígeno y ozono, donde realiza una rutina de ejercicios físicos a una temperatura superior a los 35 grados.
Otros de los beneficios es que ayuda a combatir la celulitis, estrías, arrugas y retrasa el proceso de envejecimiento en la piel.
¿Cuáles son los riesgos?
Los centros de belleza, profesionales y especialistas en esta terapia han asegurado que está técnica tiene pocas contraindicaciones y casi no hay riesgos en someterse a este tipo de técnicas; sin embargo, sí está contraindicada para personas con hipertensión o hipotiroidismo.
Recientemente Marcela Laviero, de 49 años de edad, murió durante una sesión de ozonoterapia en la sucursal de Figurella en Buenos Aires, Argentina. Se reportó que la mujer sufrió de dos paros respiratorios mientras realizaba ejercicios físicos en una cámara hiperbárica.
El instituto de belleza aseguró que se trata de una muerte natural por causas ajenas a la terapia. Por su parte, el jefe del área de Deportología del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires, Oscar Mendoza, dijo a diario Clarín: “Practicar ejercicios con temperaturas elevadas implica riesgo de deshidratación y de que se produzcan alteraciones en el metabolismo. Pueden modificarse las proporciones de sodio y potasio del cuerpo y existe el peligro de que se desencadene una arritmia, que en algún caso podría derivar en una muerte súbita”.
A pesar de las ventajas que pueda prometer la ozonoterapia, es importante que se tomen en cuenta las contraindicaciones antes de someterse a este tipo de técnicas.