SAN SEBASTIÁN. La quinta jornada del Festival Internacional de Cine de San Sebastián empezó con lluvia y nubarrones, pero eso no impidió que el público volviera a llenar las salas o se agolpara en las escalinatas del Hotel María Cristina, esperando la llegada y partida de figuras, como sucede a diario.
En el recambio artístico se fueron, entre otros, Álex de la Iglesia, Raphael y la bulliciosa troupe de Mi gran noche, así como Ricardo Darín -que volverá para la gala de cierre, tras una filmación en Madrid y el español Javier Cámara, coprotagonista de Truman, en la que también actúa Dolores Fonzi, que está presentando en la sección Horizontes Latinos el drama La patota (aunque internacionalmente se conoce con el título Paulina), de Santiago Mitre, también llegado a Donostia, tal el nombre vasco de esta ciudad.
La presencia estelar del día fue la modelo y actriz Sienna Miller, coprotagonista, junto a Tom Hiddleston y Luke Evans (actor de El Hobbit) de High Rise, versión de la novela homónima de J. G. Ballard, dirigida por el británico Ben Wheatley, que se aguardaba con expectativas en la competencia de San Sebastián, donde fue tibiamente recibida por el público. Es que esta historia sobre los desbordes físicos y psicológicos de los habitantes de un rascacielos moderno e impersonal peca de reiteración de ideas y situaciones, un subrayado innecesario en esta cruda fábula sobre la incomunicación y alienación propia de muchas grandes urbes.
Otra aspirante a la Concha de Oro, el máximo galardón que otorga San Sebastián, es Bakemono No Ko, del realizador japonés Mamoru Hosoda (también invitado a esta 63» edición), el primer largometraje de animación que forma parte de la competencia oficial, donde desembarcó ayer con prolongados aplausos. Dato interesante: en la Sección Oficial también estuvo en 2013, pero fuera de concurso, Metegol, de Juan José Campanella, primera exponente animada que seleccionó este festival para su función de apertura.
Más allá de la competencia central, Hombre irracional, la nueva película de Woody Allen, de inminente estreno en la Argentina, tuvo ayer un celebrado paso por la sección Perlas. Mientras que en Horizontes Latinos, además de La patota, nuestro país estuvo presente con Magallanes, de Salvador del Solar, un drama sobre segundas oportunidades, coproducido con Perú, Colombia y España, en el que interviene Federico Luppi.
El cine argentino volverá a mostrar hoy su más reciente producción, con la última proyección de La patota/Paulina en Horizontes Latinos, y el debut de Paula, ópera prima de Eugenio Canevari, en Nuevos Directores, otro destacado segmento del festival.
Premio para Marco Berger
Mariposa, la comedia dramática de Marco Berger exhibida en numerosos festivales, le valió al director argentino el Premio Sebastiane Latino "al mejor film latinoamericano estrenado el año último y que mejor representa la realidad Lgtbi", según destacó el jurado que otorga el galardón. El cineasta, que por estos días acompaña las proyecciones de Mariposa en la sección Zabaltegui, recibió el premio de manos del prestigioso director vasco Jose Mari Goenaga.