Carlos Berlocq nunca ganó un título ATP y a partir de hoy ocupa el puesto 64º en el ránking ATP. A él la fama y el reconocimiento le llegó tarde, y a los 30 años disfruta de su momento en el tenis.
Charly le dio la clasificación a semifinales al equipo argentino de Copa Davis al ganar el quinto y último punto de la serie contra Francia.
Nacido en Chascomús, debutó en un torneo de ATP en julio de 2005, en Stuttgart, y su única final la jugó en febrero de 2005 en Viña del Mar, sobre polvo de ladrillo, cuando perdió contra Pico Mónaco.
El mejor ranking de su carrera lo tuvo en marzo de 2012, cuando llegó a ser número 37 del mundo. Y en su historial ganó 14 torneos Challenger, siendo el argentino con más títulos a este nivel.
En julio de 2008 tuvo problemas en la muñeca derecha y estuvo seis meses sin jugar. Regresó en enero de 2009, pero sufrió la ruptura del fibrocartílago triangular y debió ser operado. Se alejó del circuito durante ocho meses y volvió como 717º.
Tenía 26 años, y muchos suponían que el final de su carrera estaba cerca. Pero se reinventó a sí mismo, resurgió con mucho esfuerzo y voluntad, y a partir de 2010 comenzó una gran escalada que le permitió no bajar más del top 100.
En 2011 se ganó su primera convocatoria al equipo de Copa Davis, en semifinales ante República Checa. Jugó dos puntos, el dobles con Schwank y el single ante Berdych, reemplazando a Del Potro. No ganó ni un set.
Este año, la negativa de Delpo a jugar la Davis le abrió otra vez la puerta. Contra Alemania le ganó por abandono a Kohlschreiber, y el domingo logró el triunfo más importante de su carrera ante Simon. Todo un premio a la perseverancia.