Cambio de planes en toda regla. En contra de todo lo que se haba anunciado, no habr cumbre entre Gerardo Martino y Leo Messi. El tcnico del Bara y el crack argentino no mantendrn un cara a cara en Argentina aprovechando el pequeo parn de las vacaciones navideas. En entrenador y el jugador seguirn cada uno por su camino y el esperado reencuentro no se llevar a cabo hasta que el futbolista no se reincorpore a los entrenamientos ya de regreso a Barcelona.
La variacin del guin previsto obedece a motivos muy simples. El plan de trabajo alrededor de Messi avanza a la perfeccin y no se considera imprescindible forzar un encuentro con el tcnico para evaluar el desarrollo de la lesin, comprobar su estado fsico y mucho menos levantar la moral del futbolista. No son necesarios esfuerzos adicionales en un momento en el que todo va sobre ruedas.
Pero lo ms importante es que la presencia de Elvio Paolorosso ha servido para mantener un contacto estrecho entre el jugador y el mximo responsable tcnico de la plantilla. El preparador fsico lleva das al lado de Leo y la comunicacin con el Tata es permanente. Y ms cuando los diferentes ejercicios se han saldado con resultado positivo.
Adems, los enlaces han sido mltiples y han permitido seguir al detalle el proceso de recuperacin. La presencia del doctor Ricard Pruna, del director deportivo, Andoni Zubizarreta, y de otro de los asistentes prximos al futbolista, Pepe Costa, han contribuido a que Messi no solo est al corriente de todo lo que acontece en el vestuario blaugrana sino que adems el club haya supervisado todos los controles del dispositivo organizado por la AFA.
Con Messi corriendo y forzando ya sobre el terreno de juego, la calma preside todo aquello que rodea al crack. La cuenta atrs para su regreso a Barcelona ya est en marcha y lejos de alterar el da a da del jugador se ha estimado oportuno que Leo siga con su planificacin deportiva y rodeado de su familia antes de emprender el vuelo de retorno a la Ciudad Condal.
Gerardo Martino as lo ha entendido. Los das de fiesta dispensados para retomar el pulso con la familia y los amigos son contados y no se considera indispensable el encuentro con el jugador. El Tata cree que conceder un aire de normalidad a todo el proceso es lo ms saludable en un futbolista que debe estar centrado nica y exclusivamente en su puesta a punto, volcado en el trabajo fsico y rodeado en todo momento por su familia ms cercana. Y el Tata, poco ms o menos, ms de lo mismo. Con Elvio Paolorosso evaluando sobre el campo la mejora fsica de Leo, intenta exprimir al mximo sus das de descanso.
Todo est bajo control y no hay vuelta de hoja. Nada de cumbre en Rosario, reuniones de urgencia en Buenos Aires ni nada de nada. Todo est dicho, todo est hablado y solo es cuestin de quemar los plazos previstos antes de que Leo Messi haga acto de presencia en las instalaciones de la Ciutat Esportiva y constate su recuperacin total y absoluta con la totalidad del cuerpo tcnico y, por supuesto, el resto de la plantilla blaugrana. Hasta ese momento, Paolorosso se basta para ejercer su labor de enlace y evitar ms presiones de la cuenta en este trance. El Tata as lo quiere.