El astro del Barcelona y de la selección argentina Lionel Messi llegó este viernes al juzgado de Gavá, cerca de Barcelona (noreste de España), donde declarará como imputado por un supuesto fraude fiscal, comprobó la AFP.
Messi llegó en coche sobre las 10h45 locales (08h45 GMT), aparcó frente a los juzgados y caminó hacia el recinto judicial protegido por un cordón policial.
El artillero argentino del Barça, vestido con camisa blanca y americana oscura, se dirigió al juzgado sonriendo tímidamente, mientras los aficionados azulgranas no paraban de corear "¡Ese Messi, Ese Messi, eh, eh!".
"Lo que quiero es que se resuelva rápido y que Messi esté tranquilo y se preocupe sólo del fútbol", dice a la AFP Joaquín Bosch, un prejubilado de 60 años enfundado en una camiseta del Barça.
"La pulga" llegó así cerca de una hora después que su padre, Jorge Messi, que se había personado en los juzgados poco antes de las 10h00 locales (08h00 GMT).
Ambos debían declarar ante el juez por una presunta evasión fiscal de 4,16 millones de euros relacionada con los ingresos por derechos de imagen del jugador, de 26 años, entre 2006 y 2009.
Tras ser imputados por un juez en junio pasado, sus abogados aseguraron que el jugador "ya ha pagado lo que legalmente le correspondía". Pero a mediados de agosto los Messi ingresaron a Hacienda 5 millones de euros para saldar la deuda y los intereses, lo que rebajará notablemente la pena en caso de que sean condenados.
El caso nació de la denuncia de una fiscal de Barcelona el 13 de junio, que acusó a los Messi de "burlar" la tributación cediendo los derechos de imagen del delantero a "sociedades puramente instrumentales" ubicadas Belice y Uruguay, dos países considerados como paraísos fiscales por la OCDE en la época de los hechos incriminados.