La presidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió hoy a empresarios, funcionarios y trabajadores tener "la fuerza, la entereza y la integridad de sostener este modelo industrialista, que aumentó exponencialmente el producto bruto industrial durante la última década".
Al encabezar del acto de inauguración de la planta de heladeras SIAM, en el partido bonaerense de Avellaneda, Cristina resaltó la importancia de "la recuperación de la fábrica SIAM", que "estaba en ruinas, como lo estaba la Argentina en el año 2003".
La jefa de Estado estuvo acompañada por el gobernador bonaerense, Daniel Scioli; el ministro de Economía, Axel Kicillof; el ministro de Trabajo, Carlos Tomada; el secretario de la CGT, Antonio Caló; y el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi.
"Casas para los trabajadores, apertura y reapertura de fábricas y exportaciones y seguir adelante con un modelo que ha dado bienestar y que es necesario sostenerlo entre todos", subrayó la jefa del Estado.
Desde el sur del Gran Buenos Aires, Cristina enfatizó: "A escasas horas del Día del Trabajador, es una alegría estar aquí en Avellaneda, que supo ser durante la década del `30 y del `40 una de las ciudades más industrializadas del país, reabriendo una fábrica como SIAM".
"La fábrica no estaba deteriorada, estaba en ruinas, como estaba en ruinas la Argentina en 2003, y hoy la estamos reabriendo y recuperando", resaltó.
Con respecto a la reapertura de esa fábrica, Cristina aseguró que "SIAM Di Tella, fue proveedora de combustible de YPF, luego SIAM fue la primera productora de tubos de acero producida en la Argentina" y expresó su reconocimiento "al Ingeniero Di Tella que apostó a innovar y producir en nuestro país".
Cristina recordó que "el apellido Di Tella está vinculado también al arte porque el Instituto Di Tella marcó a una generación culturalmente, como la familia Di Tella lo había hecho en materia de producción industrial".
En ese marco, agregó que "la productividad no está solamente vinculada al esfuerzo del trabajador sino que está vinculada también a la inversión en tecnología que hagan los empresarios" porque "si tenés una planta obsoleta, podés tener los mejores obreros, pero no vas a tener mayor productividad", expresó.
A su vez, la Presidenta remarcó que "cuando los trabajadores están bien deben tender a conductas que den sustentabilidad a este presente".
Por otra parte, la mandataria afirmó que "no hay posibilidad de aislar lo que pasa en un país de lo que pasa en el mundo", y recordó que "en la década del 80 el grupo Di Tella fue desmembrado", y resaltó que la planta puesta en funcionamiento demandó una inversión superior a los 35 millones de dólares.
Antes del comienzo del discurso de la Presidenta, Rubén Chernajovsky, presidente del grupo Newsam, recordó que cuando hace dos años este mismo grupo empresario abrió una fábrica en Tierra del Fuego, Juan Belén (secretario adjunto de la UOM), que había sido empleado de esa sede de Avellaneda, se acercó y le "pidió ayuda para recuperar SIAM en Avellaneda".
Belén, visiblemente emocionado escuchó el relato de Chernajovsky que destacó que "dos años después de ese hecho, estamos concretando esa idea y llevando adelante esa acción".
A su vez, la CGT y la UOM de Avellaneda le entregaron dos placas a la Presidenta, en reconocimiento por "las políticas llevadas a cabo en estos años".
Antes del acto, la jefa de Estado mantuvo videoconferencias con las ciudades de La Rioja, donde entregó 130 viviendas del Plan Inquilinos y Recupero Anticipado; La Matanza, donde se inauguró la ampliación de la fábrica de ascensores Servas; y con Morteros, Córdoba, donde dejó inaugurada una fábrica de leche en polvo de la firma "Lactear".