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El quarterback novato Johnny Manziel admitió que le faltó "seriedad" desde su llegada, esta temporada, a Cafés de Cleveland, en el que antes de jugar por primera vez ya había generado altas expectativas por su exitoso andar como colegial.
"Ha sido un año de crecimiento para mí. Éste es un trabajo para mí ahora, tengo que tomar esto mucho más en serio. No he dado la mejor versión de mí aquí (en Cleveland)" , confesó.
Reconocido por su talento en la Universidad, el joven de 22 años también estuvo inmiscuido en escándalos de ostentosas fiestas y otras distracciones que terminaron por opacar sus pobres cifras luego de su arribo a la NFL.
"Aún tenía un poco de mentalidad colegial y eso es algo que absolutamente desapareció de mi mente" , admitió el mariscal de campo en entrevista con un periódico local.
El ganador del Trofeo Heisman en 2012 apareció en dos encuentros como titular, en reemplazo de Brian Hoyer, a quien en el último mes se le escapó la posibilidad de guiar a sus compañeros a los playoffs.
En estos dos exámenes, "Johnny Football" registró 13 envíos acertados de 26, dos intercepciones sin pases de anotación y, el domingo pasado ante Panteras de Carolina, no concluyó el duelo pues se marchó lesionado del tendón de la corva.
Además de estas dos aperturas, entró en algunas series aisladas, repartidas a partir de la semana 13, entre las cuales destacó un acarreo de 10 yardas hasta las diagonales en contra de Bills de Buffalo, durante el primer choque en el que pisó los emparrillados de la NFL.
Por último, se dijo comprometido para encarar el futuro periodo de "descanso" y, de paso, respondió a sus detractores: "No creo que sea justo cansarse de alguien después de siete cuartos de futbol"
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