Después de que el gobierno argentino anunció el pago de mil mdd para lograr un acuerdo y negociación sobre los "fondos buitre", súbitamente recibió un inesperado nuevo revés judicial por parte de Estados Unidos.
Ayer, el juez Thomas Griesa se negó a suspender de forma temporal el fallo por el que EU condena a Argentina a pagar 1,300 millones de dólares alegando que "no es una propuesta adecuada".
El país sudamericano pretendía conseguir una prórroga para pagar el vencimiento de deuda del próximo día 30, pero finalmente no lo ha conseguido, lo que vuelve a lastrar a la bolsa una jornada más.
Las acciones líderes de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires cerraron ayer con una baja del 2,03%, aunque llegaron a perder más del 3%, en una jornada marcada por la situación judicial generada en torno a los fondos buitre.
El indicador Merval retrocedió a 7.820,58 puntos, el balance de precios dejó 15 alzas, 45 bajas y 5 especies sin cambios y el volumen negociado llegó a 178,1 millones de pesos.
La operatoria bursátil estuvo condicionada por la decisión del juez federal de Nueva York Thomas Griesa de rechazar el pedido de la Argentina para suspender transitoriamente la sentencia que obliga a pagar al país bonos en default desde 2001.
Esta última decisión de EU deja a Argentina con pocas opciones: desafiar estas órdenes judiciales y negarse a pagar, caer en impago (default) o negociar un calendario de pagos con los fondos buitre. No obstante, si Argentina no paga los 900 millones que vencen el próximo lunes, cuenta con otros 30 días de gracia adicionales para hacerlo.
ILUSIÓN Y PAGO. Argentina pagó ayer más de mil millones de dólares de su deuda en medio de la batalla que mantiene para evitar que la justicia estadunidense obligue al país a entrar en una moratoria, reveló el ministro de Economía, Axel Kicillof.
El funcionario explicó que se pagaron 832 millones de dólares por concepto de capital e intereses, de los cuales 539 millones de dólares fueron depositados en las cuentas del Bank of New York Mellon en el Banco Central de Argentina.
"Más los vencimientos que el día de la fecha surgen, en pesos, el pago realizado supera los mil millones de dólares", agregó Kicillof en rueda de prensa que generó una fuerte expectativa por el conflicto abierto con los "fondos buitres" (especuladores).
Dichos fondos representan menos del 8.0 por ciento de los acreedores, ya que el 92.4 por ciento restante sí aceptó los canjes en bonos cuyos pagos Argentina ha cumplido en tiempo y forma, como el que realizó ayer.
El problema es que si el juez de Estados Unidos, Thomas Griesa, no suspendía su fallo en tanto se inicie una nueva negociación con los acreedores, los pagos de Argentina corren el riesgo de ser embargados.
"No pagar teniendo los recursos y forzando un default (moratoria) voluntario no está contemplado", aseguró Kicillof al subrayar que con este pago Argentina ratifica "su firme e irrestricta voluntad de cumplimiento para honrar sus deudas".
Reiteró que la convicción es cumplir con el 92.4 por ciento de sus acreedores que sí aceptaron un canje, apelando al sentido común y al ejercicio racional de que los derechos de una mayoría no puede ser vulnerado por una minoría, es decir, por los "fondos buitres".
Por un instante, ayer el mercado argentino vivió una jornada eufórica gracias a que el gobierno revirtió su posición contra los fondos buitres, pero horas después la corte de EU acabó con la ilusión.
Sin salida
Estados Unidos deja a Argentina con pocas opciones: desafiar estas órdenes judiciales y negarse a pagar, caer en impago (default) o negociar un calendario de pagos con los fondos buitre. Si Argentina no paga los 900 mdd que vencen el próximo lunes, cuenta con otros 30 días de gracia adicionales para hacerlo.
Razonamiento
Reiteró que la convicción es cumplir con el 92.4 por ciento de sus acreedores que sí aceptaron un canje, apelando al sentido común y al ejercicio racional de que los derechos de una mayoría no puede ser vulnerado por una minoría, es decir, por los “fondos buitre”.