Hermetismo tras la reunión por la AMIA

Suiza. Bajo un hermetismo total, funcionarios argentinos e iraníes se reunieron cara a cara en Ginebra para avanzar en la recomposición de las relaciones bilaterales, a través de un nuevo impulso al esclarecimiento del atentado terrorista contra la AMIA de 1994.

Las delegaciones de ambos países se entrevistaron durante poco más de dos horas, a puertas cerradas, y en una pequeña sala de la sede de la ONU en Suiza. Según trascendió, ninguno de los representantes hizo declaraciones públicas ni antes ni después de sentarse a la mesa a dialogar.

Los contactos entre la Argentina e Irán comenzaron alrededor de las 11 y se interrumpieron en torno al mediodía, pero no se reanudaron a pesar de que la sala VI del Palacio de Naciones estaba reservada por la delegación nacional para “un encuentro bilateral” para tres horas más, entre las 14 y las 17. Ni la representación diplomática argentina ni la iraní quisieron hacer comentarios sobre el segundo contacto formal entre naciones. Fuentes diplomáticas indicaron que lo más probable es que, si tiene que haber algún tipo de pronunciamiento, se haga desde las respectivas capitales, y estará a cargo de las cancillerías.

El cuerpo diplomático argentino está presidido por la procuradora del Tesoro de la Nación, Angelina Abbona, quien fue acompañada por el vicecanciller, Eduardo Zuain y por la embajadora Susana Ruiz Cerruti.

Se trata del primer encuentro para establecer un “marco jurídico” para llevar adelante la investigación judicial en la que están acusados ocho funcionarios y ex funcionarios del gobierno iraní por el atentado contra la AMIA en el que murieron 85 personas.

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