Por Pablo Gravellone
"El método Guardiola no existe", dijo Manel Estiarte, colaborador de Pep Guardiola durante el exitoso proceso de cuatro años en el Barcelona. Fue un baño de agua fría para todos, quienes colmaron el Gran Rex con el sueño de escuchar una fórmula secreta para crear un súper equipo exitoso.
Más de 3600 personas disfrutaron de Guardiola, que llegó al teatro de la calle Corrientes de la mano de Tus Ídolos, Grupo Rhuo y Consultora Med. Y lejos de esa receta mágica, ese público se encontró con un Pep sencillo y humilde. Muy sencillo. De zapatillas negras, saco gris, remera azul y jeans. Sencillo para vestir y para hablar de fútbol. Sin un discurso preparado, improvisando y hasta perdiendo el hilo de su propia idea.
A las 20.15 apareció Guardiola arriba del escenario, luego de una extraordinaria exposición de Estiarte, que además de colaborar con Pep fue una gloria del waterpolo español. Del otro lado esperaban para escuchar, ansiosos, personajes como Carlos Bilardo, José Luis Chilavert, Ricardo La Volpe, Roberto Trotta, Diego Cagna, Diego Cocca, Daniel Garnero y Julio Lamas, entre otros.
El extécnico del Barcelona, y con destino próximo en el Bayern Munich, dedicó la charla a Marcelo Bielsa y César Luis Menotti, quienes lo recibieron en Argentina y aconsejaron cuando estaba dando sus primeros pasos. También destacó en su formación la charla que tuvo con otro argentino: Julio Velasco, exentrenador de la selección italiana de voley.
"Maradona fue mi ídolo de la infancia", contó en medio de su disertación, pero dejó algo en claro: "Definitivamente, no vi ninguno mejor que Messi. Sus padres lo hicieron bueno".
El fútbol para él pasa por la mitad de la cancha, ahí es donde se cocinaron sus éxitos. Y es ahí donde reveló uno de las claves de ese presunto "método Guardiola", que ahora se sabe que no existe como tal.
"La pelota tiene que pasar siempre por el centro. Y ahí siempre hay que tener un hombre más que el rival. Eso es lo que más me ha quedado en la cabeza desde chico y lo que más me gusta. No me pregunten por qué, pero es así como me gusta y lo quiero yo", destacó.
"Cuando tienes uno más en el mediocampo que el rival tienes mas posibilidades de pasar el balón y tener superioridad", agregó el DT catalán de 42 años, y repitió la idea varias veces, incluso mostrando videos de su Barça.
En la misma idea, habló de la transformación de Messi en ese equipo que ganó 14 títulos: "A Messi lo pasamos de la derecha al medio porque para mi los mejores tienen que jugar por adentro, no por afuera, ahí es donde hay que jugar el balón".
En el final, Guardiola respondió algunas preguntas de Juan Pablo Varsky, y ahí volvió a dar un ejemplo de su perfil bajo: "Messi me enseñó a mí. Por favor. El juego le pertenece a los futbolistas...".
Javier Mascherano también fue centro de sus elogios: "Valió la pena conocerlo, un sol de persona, un gran profesional. Dudaba de llevarlo a Barcelona porque era el capitán de la Selección argentina, y no venía a ser titular. Pero desde el día que llegó demostró lo grande que es".