La Cámara de Exportadores de Argentina (CERA) solicitó hoy al Gobierno suspender con urgencia la norma que impide el transbordo de productos nacionales en puertos uruguayos, al considerar que la medida "ha sido tomada de manera aislada e intempestiva" y afecta la competitividad del sector.
"La disfuncionalidad no puede ser una política de Estado", resaltó la entidad en un comunicado de prensa, y agregó que los exportadores pidieron al ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo que "suspenda la Disposición Nº 1108/13 de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables".
Se trata de una norma que impide el transbordo de las exportaciones argentinas por puertos uruguayos, que fue emitida el pasado 25 de octubre y publicada en el Boletín Oficial cuatro días más tarde, en medio de una escalada de tensión en la relación bilateral con Uruguay.
La Cámara que lidera Enrique Mantilla solicitó a Randazzo que revea esa medida "en defensa de los corredores logísticos seguros para las exportaciones argentinas".
"La medida de impedir el transbordo de las exportaciones argentinas es inconveniente, genera extra costos y ha sido tomada de manera aislada e intempestiva afectando exportaciones en curso", remarcó Mantilla.
Subrayó también que "en estos momentos la competitividad de las exportaciones y el desarrollo económico deben ser una prioridad" para el Estado nacional.
El pedido de la entidad de produce en un momento de chispazos al por mayor en la relación entre Argentina y el vecino país después de la decisión del gobierno de José Mujica de autoriza a la pastera UPM de incrementar su producción a orillas del río Uruguay, frente a la ciudad entrerriana de Gualeguaychú.
Una vez conocido el guiño de Mujica a las autoridades de la ex Botnia, el gobierno argentino denunció -finalmente- que la planta contamina, como venían planteando desde hacía años los miembros de la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú.
En este contexto, exportadores uruguayos aseguraron que desde entonces están teniendo más dificultades para ingresar sus productos a la Argentina.
"Se trata de la primera represalia concreta que impone la Argentina por la decisión de Uruguay de aprobar el aumento de producción de la pastera de Fray Bentos", comentó un funcionario del vecino país, que pidió no ser mencionado, según publicó el diario El País de Montevideo.
Tras la decisión de Mujica, a fines de septiembre último, los ingresos pendientes promedio que percibe Uruguay por mercaderías que salen rumbo a este país se elevaron de un promedio de 5 millones de dólares a U$S 15 millones, según fuentes aduaneras y gubernamentales.
En el caso de los exportadores argentinos, "la urgente suspensión solicitada es para abrir un espacio de reflexión con una agenda que incluya los efectos de corto plazo para todos los contratos de exportación en curso".
Y que también contemple "los efectos en materia de competitividad exportadora y desarrollo económico, la coherencia de la medida con el Protocolo de Montevideo sobre el Comercio de Servicios y del Programa de Liberalización en materia de Transporte Marítimo del Mercosur".
Mantilla sostuvo que la CERA promueve con el concepto de ´Argentina innovadora´ los ejes de integración, inversión e innovación que "son el núcleo duro de la Estrategia Nacional Exportadora".