"La Argentina posee un gran potencial para el desarrollo de biogas, a partir su situación en materia agroindustrial y agroganadera", afirmó hoy Lorena Tobares, del área de Tecnología de YPF.
La especialista de la petrolera estatal formuló esa apreciación al disertar en el 3º Congreso Latinoamericano y del Caribe de Refinación, que concluye hoy en Buenos Aires.
Tobares, referente técnica de YPF en la formulacion de nuevos lubricantes, químicos, agroquímicos, biocombustibles y energías renovables, destacó la existencia local de gran cantidad de residuos y subproductos que pueden ser utilizados como materia prima del biogás.
Según la experta, "la gran produción industrial en los últimos años aumentó considerablemente la demanda de energía, y a una velocidad tal que la infraestructura y las inversiones realizadas no alcanzan para atender la demanda".
Por eso, añadió, al igual que en otros países, "hay una tendencia a focalizarse en el desarrollo de energías no convencionales o renovables, como la eólica, la hidráulica, la geotérmica y la de la biomasa o bioenergía".
Tobares explicó que biomasa es toda materia orgánica que proviene de un proceso biológico, ya sea espontáneo o provocado, y que puede ser utilizado como fuente de energía.
Señaló luego que la Argentina experimenta a partir de 2006 un boom en materia de bioetanol y biodiesel, pero "en otras economías latinoamericanas y en la Unión Europea el biogas es un biocombustible muy actual".
Sobre todo en Alemania, donde en los últimos años fue creciente la instalación de plantas para procesar líquidos de vertederos de la agricultura y de residuos urbanos.
"Para este año -señaló Tobares- se contempla en ese país una capacidad instalada de 2.900 Mw, y se impulsa el corte de GNC (gas natural comprimido) con 10% de biogás".
Tobares resaltó que para la producción de ese tipo de energía se utilizan residuos sólidos urbanos o de empresas alimentarias, agrícolas, pesqueros y de los propios biocombustibles, si bien los mayores rendimientos se logran con insumos granarios.
Ese proceso, además, implica contar con "efluentes muy ricos en nitrógeno y carbono, que pueden utilizarse como fertilizantes".
En el plano nacional, la especialista de YPF recordó el "Mapeo de Oferta y Demanda Integrada" realizado en 2010 por la FAO (Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) junto con el INTA y la secretarías de Energía, de Ambiente y de Ganadería.
Ese estudio realizó un relevamiento de toda la biomasa disponible para la producción de biogás y el resultado fue de 148 millones de toneladas, precisó Tobares.
La experta recordó además que en 2006 se sancionó la ley de energías renovables, que prevé que para 2016 el 8% de la capacidad instalada eléctrica debería corresponder a ese tipo de fuentes.
Tobares enumeró luego iniciativas estatales en marcha, como el Genren (Programa de Generación de Energías Renovables), que licitó proyectos por 1.045 Mw, entre ellos, 145 de biogás; y los proyectos del INTA para sectores rurales.
Estos últimos, detalló, apuntan a la cogeneración para uso domiciliario, el alumbrado público municipal y el autoabastecimiento de 3 mil tambos.
"La bioenergía va tomando cada vez más importancia y las políticas de fomento a este tipo de tecnologías contribuirán a desarrollar diversificar la matriz de producción", concluyó Tobares.