“El juez Thomas Griesa autoriza a pagar bonos con vencimiento en diciembre, pero posterga la definición sobre cuestiones de fondo para el 2015, haciendo caso al pedido de los fondos buitre”, dijo ayer el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. El magistrado de Nueva York habilitó por tercera vez al Citibank a canalizar el pago de los 85 millones de dólares correspondientes a los vencimientos de intereses del 31 de diciembre próximo. Capitanich ratificó que el país no está dispuesto a aceptar ninguna extorsión ni condicionamiento en el litigio contra los fondos buitre y acusó a Griesa de haber generado un “intríngulis” y un “limbo” jurídico con sus fallos.
“Si ésa es la Justicia norteamericana seria, que reivindica la división de los tres poderes, estamos ante un problema de magnitud inconmensurable”, sentenció Capitanich, en su habitual conferencia de prensa desde Casa de Gobierno. “Entendemos que la decisión del juez Griesa respecto de la sentencia original verdaderamente ha sido un descalabro; ha articulado un limbo jurídico, un intríngulis judicial que, lejos de resolver el problema, lo agudiza”, afirmó el jefe de ministros. “Se trata de decisiones de carácter parcial, que responden solamente a la imposición de los fondos buitre”, agregó en referencia al bloqueo que impuso ese tribunal para que los tenedores de títulos argentinos reestructurados no accedan al cobro de los respectivos servicios de esa deuda.
“La Argentina siempre ha mostrado voluntad de pago y por eso paga regularmente. No ha modificado un ápice su posición en el litigio con los holdouts. Es poco seria la decisión de Griesa y es poco seria la actitud de los fondos buitre en estas instancias”, dijo Capitanich. “Argentina sólo aceptará un acuerdo en condiciones de equidad”, subrayó el jefe de Gabinete.