Por Rodolfo Bella / La Capital
"Encontré un gran apoyo de toda la comunidad teatral argentina. Ese respaldo de referentes artísticos me entusiasma y reconfirma que la decisión de aceptar el desafío fue certera", expresó Marcelo Allasino, el flamante director ejecutivo del Instituto Nacional del Teatro (INT) a días de su asunción en el cargo. Allasino es actor y director teatral de Rafaela y se desempeñó como secretario de Cultura de dicha ciudad, además de haber creado el Festival y la Escuela de Artes Escénicas de Rafaela. El funcionario llega hoy Rosario para realizar una reunión en Espacio Bravo, en lo que será el inicio de una serie de encuentros que tendrá lugar en las distintas provincias para generar contacto con miembros de la comunidad teatral de cada región.
—¿Cuáles son los objetivos de las reuniones que vas a tener en Rosario y otras ciudades?
—El principal objetivo es generar un primer acercamiento desde la Dirección Ejecutiva del INT y el Ministerio de Cultura de la Nación con las comunidades teatrales del país. La falta de diálogo y encuentro ha sido una de las carencias más significativas en la gestión del Instituto desde su creación.
—¿Cuáles serán los principales lineamientos de tu gestión y qué áreas es necesario reforzar?
—Nuestro proyecto de acción se apoya en recuperar el diálogo con todos los sectores, para encarar un plan participativo, democrático, diverso y federal, potenciador de una actividad que da identidad a nuestro país; el teatro argentino. Esas motivaciones que dieron origen y cuerpo a la Ley 24.800 demandan un cambio de paradigma. Es hora de dejar de pensar al apoyo que propone la ley, sólo como una forma de asistencialismo a través de subsidios, para potenciar un entramado teatral que estimule, desarrolle y multiplique las posibilidades profesionales, con una mirada que incluya a todos los sectores: desde los vocacionales, hasta los de investigación y experimentación. Queremos generar un programa de verdaderas políticas transformadoras de la escena nacional, al corto, mediano y largo plazo. Poniendo el foco en la rigurosidad como eje constructor de la excelencia y la calidad. Para potenciar las artes escénicas como sector productivo debemos fortalecer lo artístico. Uno de los ejes centrales es propiciar una formación rigurosa en las regiones de producción más irregulares. Equilibrar el desarrollo de la tarea profesional en todo el territorio nacional: las casi dos décadas de trabajo del Instituto no han logrado equiparar la tarea en los lugares más débiles con la producción escénica de las ciudades más desarrolladas.
—¿En que situación encontraste el Instituto al momento de tomar posesión del cargo?
—El INT ha atravesado una importante crisis institucional que se puso de manifiesto durante todo el año 2015, y que llegó a los medios nacionales, ha afectado los vínculos, confundido los roles y ha puesto de manifiesto una profunda e histórica discusión acerca de responsabilidades y procedimientos. En lo financiero nos encontramos con una partida de 38 millones de pesos que requirieron de la firma de cientos de expedientes atrasados para poder ser pagados antes de la finalización del ejercicio 2015. La revisión exhaustiva de muchos de esos expedientes, harán que varios queden pendientes para ser ejecutados en 2016. No estamos dispuestos a firmar el devengamiento de dineros públicos sin el respaldo transparente de convenios y rendiciones de cuentas que se ajusten a tiempos y criterios de control apropiados.
—¿Cuál es el balance de la reunión que tuviste con los delegados de las provincias? ¿Cuáles son los puntos más urgentes en general, y de Santa Fe en particular?
—La reunión plenaria con los representantes provinciales fue positiva. Se puso de manifiesto el deseo compartido por retomar el diálogo y generar espacios constructivos para superar la crisis institucional. Ahora se encuentran preparando un informe que le solicitamos junto a Federico Irazabal, quien es el representante del Ministerio en el Consejo de Dirección. Las demandas más urgentes de los representantes provinciales tuvieron que ver con dar respuesta a los planes que cada uno de ellos lleva adelante en sus provincias. Es fundamental destacar que el INT dispone de un presupuesto muy importante para el fomento del teatro en cada una de las regiones. Los criterios, los procedimientos y la gestión de esta porción del presupuesto es lo que ha generado gran parte de las discusiones del año pasado.
—¿Cuál es el aporte de tu experiencia, primero como artista del interior y conocedor de las necesidades, y sobre todo como secretario de Cultura de Rafaela, creador del Festival y de la Escuela de Artes Escénicas de Rafaela, en tu función como director del INT?
—Creo que el hecho de ser un artista y gestor de gran experiencia en el terreno independiente y haberlo complementado con mi trabajo en la gestión y la función pública me habilita a hablar, gestionar y actuar desde un lugar de conocimiento real y concreto. A mí nadie me contó nada sobre cómo era hacer teatro sin el INT, y cómo fue durante la etapa de existencia del organismo: lo viví en carne propia. Tengo la experiencia de quien desde un lugar del que poco se esperaba en términos teatrales, logró generar espacios de formación, grupos, salas, espectáculos, festivales y una escuela, proyectando a Rafaela como un verdadero polo teatral.
—¿Encontraste resistencia o apoyo a los planes que tenés para el Instituto?
—Encontré un gran apoyo de toda la comunidad teatral argentina. Ese respaldo de referentes artísticos me entusiasma y reconfirma que la decisión de aceptar el desafío fue certera. Encontré un gran apoyo y una postura muy decidida de parte del Ministerio. Resistencias también encontré y encontraré: 18 años de haber trabajado de un cierto modo no será sencillo de modificar. Pero estoy muy firme y decidido.
—¿Es posible el desarrollo de un teatro federal, que además de generar propuestas de calidad logre autofinanciarse, llegar a todo el país y generar puestos de trabajo estables?
—Sí, creo que es posible. Aunque creo que en lo referente a la cultura, la educación, la salud y la seguridad, el Estado debe garantizar la accesibilidad y protección de los ciudadanos con políticas inclusivas. Es posible el desarrollo de un teatro más federal, que genere propuestas de calidad y llegue a todo el país. Desde el Ministerio hay un gran compromiso por hacer del INT un organismo que prestigie el teatro nacional. Por eso me sumé.
Un desafío con impronta santafesina
Marcelo Allasino fue convocado por el Secretario de Cultura y Creatividad, Enrique Avogadro 10 días antes de que asumiera el gobierno nacional. “Tuvimos varias conversaciones telefónicas y luego una entrevista personal en Buenos Aires”, contó el funcionario nacido en Rafaela. Y destacó que el desafío es transformar a INT en un organismo transparente, eficiente, innovador, que prestigie la actividad teatral en todo el territorio nacional y cumpla con la Ley 24.800.