23/12/2013 ALBICELESTES ESTELARES
Sobran figuras nacionales en los mejores equipos del Viejo Continente y no parece ser casualidad.
Buenos Aires, DYN
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�Aunque Lionel Messi no haya hecho la friolera de 91 goles como el año pasado y que solo haya marcado 45 goles en 47 partidos, casi un tanto por cotejo, es imposible encontrar un futbolista argentino que llegue a eclipsarlo. Messi fue goleador (pichichi) la Liga Española que terminó a mitad de año con 46 goles, fue campeón con el Barcelona, y ganó la Supercopa de España. Las lesiones lo tuvieron a maltraer como nunca. En la final de la Supercopa ante el Atlético Madrid tuvo una lesión en el muslo izquierdo que lo dejó una semana afuera. Con el Almería, el 28 de setiembre, una rotura fibrilar pequeña en la pierna derecha lo dejó tres semanas sin jugar y a principios de noviembre el desgarro en el bíceps femoral izquierdo que recién recibió el alta como regalo de Navidad. A Messi le alcanzó para apuntalar la clasificación de Argentina al Mundial de Brasil en Paraguay para luego dedicarse a su maltrecha pierna dejando a sus compañeros ante Perú y Uruguay. Argentina solo perdió ante Uruguay en el año con lo cual nunca se fue abajo cuando el Pulga estuvo en cancha. Sergio Agüero brilla en el Manchester City como Carlos Tevez volvió a seducir a los hinchas de su nuevo club, como lo hizo en todos los lados donde estuvo. Hace de a tres goles, y pone a la Juventus arriba. Sin embargo, sabe que no tiene lugar en el seleccionado. ‘Mi objetivo es salir campeón con la Juve‘, dijo el argentino, que se dedicó en sus comienzos en el calcio a homenajear a las barriadas humildes de Buenos Aires, primas hermanas en las necesidades de su querido Fuerte Apache. En cambio el Kun quedó consolidado como una de las puntas del tridente de ataque junto a Messi y Gonzalo Higuaín, ahora haciendo goles en el Napoli, pese al mal trago de quedar fuera de la Champions. Con Angel Di María en medio de los dimes y diretes sobre una salida del Real, en el club aseguran que el rosarino, otro puntal de Sabella en el seleccionado, se quedará en tierra merengue. Pero en esta España que pese a su crisis sigue teniendo el futbol más cotizado, ahora son los entrenadores argentinos los que gobiernan los topes de la Liga, pese a las críticas que le achacan al Tata Martino, llegado al Barca campeón desde su título en Newell’s y por la recaída de Tito Vilanova. Martino asumió con el extraño pero difícil cometido de que nada cambie en el Barcelona que esmeriló Pep Guardiola para ponerlo a raya de la perfección. El Barcelona de Martino marcha puntero junto al Aleti de Diego Simeone, al que le ganó la final de Supercopa.
Se despidió con una goleada del 5-2 sobre el Getafe. Sin embargo, pese a ser líder, haber ganado 24 partidos, empatado 4 y perdido solo dos, el Tata tiene su resistencia en la prensa. Pese a no haber podido contar con el Messi lesionado. Simeone no pasa por esos despechos, al fin y al cabo, el Atlético tuvo su último festejo cuando el Cholo vestía como jugador la camiseta del ‘colchonero‘. Está primero en la Liga y pasó aceitadamente a los octavos de la Champions. Otros levantan vuelo y otros vuelan bajo. Así como Ezequiel Lavezzi se consolida en el Paris Saint Germain, Javier Pastore, de quien se esperaba más, se va perdiendo en la multitud de nombres estelares. Aparece otro nombre ahora, el de Mauro Icardi, cada vez con menos recorrido en los análisis deportivos y más en los programas faranduleros por cuestión de amoríos y no por goles o asistencias. Sin embargo en Italia, y con solo 20 años fue elegido el Mejor Jugador Joven del calcio, en su primera temporada en el Inter.
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