El Vaticano/Buenos Aires (DPA). El Vaticano confirmó hoy la autenticidad de la carta enviada por el Papa Francisco a la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner, pese a que este jueves el jefe de ceremonial vaticano, Guillermo Karcher, aseguró que era falsa y generó una polémica.
El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, aclaró hoy que "se trata del mensaje enviado a nombre del Santo Padre en ocasión de la fiesta nacional, como de costumbre suele hacer la Secretaría de Estado a través de la Nunciatura de cada país".
El vocero papal precisó a la corresponsal del diario "La Nación" que la sección de lengua española de la Secretaría de Estado vaticana le confirmó la veracidad de la misiva.
El gobierno argentino, en tanto, optó por poner punto final a la polémica y pidió "no sumar más confusión".
"En lo personal prefiero no entrar y dejar este asunto de lado", declaró esta mañana el secretario de Culto argentino, Guillermo Oliveri, a radio Vorterix.
"Lo concreto es que la carta existe, llegó como ocurre normalmente a la Secretaría de Presidencia. Se trata de un mecanismo muy sencillo", sostuvo.
El gobierno argentino se vio envuelto este jueves en un escándalo, cuando el encargado del protocolo del Vaticano declaró a la prensa argentina que era falso el saludo enviado por el argentino Jorge Mario Bergoglio en ocasión de festejar el próximo 25 de mayo un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo, y que había sido publicado horas antes por la Presidencia en su página oficial.
Karcher aseguró al canal noticioso C5N que la carta era "trucha" (falsa) y que había sido "hecha con muy mala leche" (mala intención).
El secretario de Culto y el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, convocaron de inmediato a una conferencia de prensa, en la que exhibieron el sobre y la carta original y aseguraron que había sido recibida por los canales habituales entre la Nunciatura y el gobierno argentino.
RECONOCEN EQUIVOCACIÓN
Pero a primera hora de la mañana del viernes, Karcher reconoció que se había equivocado y que la carta era auténtica.
"Hay que rectificar absolutamente. Todo oficial. No se trata de una carta, ahí está la cosa. No se trata de una carta, sino de un telegrama de forma que se manda habitualmente a los gobiernos cuando van llegando las distintas fechas patrias. Para desear la bendición del papa al respectivo gobierno y al respectivo pueblo", se rectificó el jefe de ceremonial vaticano en declaraciones a radio Continental.
"Es oficial, así que ya está. No hay nada más que aclarar. Simplemente rectificar esto que no es carta, sino es un telegrama de buenos augurios, de felicitación, del Vaticano", agregó Karcher, de estrecha vinculación con Francisco.
"Cuando empezaron a hablar de carta, yo dije que no hubo carta. El Papa no se puso de puño y letra a escribir ninguna carta. Pero el contenido es noble y refleja los sentimientos del papa que en este momentos se acerca al gobierno y al pueblo argentino para sumarse al festejo patrio", aclaró más tarde a radio Del Plata.
El jefe del protocolo vaticano reconoció en tanto que fue "un exabrupto" haber dicho que la supuesta carta falsa había sido "hecha con muy mala leche".
Este escándalo enrareció las relaciones entre el gobierno argentino y la Iglesia católica, que se habían tensado en los últimos días por el documento de la conferencia episcopal nacional que advirtió que "Argentina está enferma de violencia". Luego, Fernández de Kirchner sostuvo que los que dicen que "hoy la Argentina es violenta" lo que quieren es reeditar "viejos enfrentamientos" vividos por el país en el pasado.
El gobierno kirchnerista mantuvo una relación distante con Bergoglio cuando era arzobispo de Buenos Aires por sus críticas al poder y los reclamos para combatir la pobreza, pero los lazos se estrecharon desde que fue elegido papa en marzo de 2013.
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