ROMA.- El jugador argentino de 23 años Rubén Botta dijo que se sentía feliz de jugar "en uno de los diez clubes más grandes del mundo", en una entrevista realizada en Argentina y que publicó el sábado el Corriere dello Sport.
De un metro y 78 centímetros, contó que había tenido la misma enfermedad de Lionel Messi, pero que el tratamiento para crecer se lo hizo en Argentina, en lugar de España, como fue el caso de la estrella del Barcelona.
"Para mí será un honor vestir la camiseta del Inter y poder jugar junto a Javier Zanetti, Esteban Cambiasso, Diego Milito, el lesionado Rodrigo Palacio y a otros campeones", expresó.
La Gazzetta dello Sport había informado que "fuentes oficiales" del club milanés apuntaron que existe un acuerdo para un contrato por cinco años con la máxima figura de Tigre en la presente temporada.
Botta no renovó el contrato que tiene con el club argentino -que lucha por los octavos en la Libertadores- hasta el 30 de junio venidero y por lo tanto el Inter no deberá pagar nada por su pase.
Su sueldo base sería inicial será de 800,000 euros, un millón de dólares anuales.