El PAMI, es una obra social para jubilados y pensionistas, mayores de 70 años sin jubilación y ex combatientes de Islas Malvinas, que bajo control del Estado busca responder a la falta de atención médica y social de casi cinco millones de argentinos.
Inmerso durante décadas en los mayores escándalos de corrupción en Argentina, sus responsables llegaron a ser procesados por la justicia por administración fraudulenta durante el menemismo. Se estima que en la última década el servicio pasó de atender un millón de usuarios reales, a casi cinco millones en la actualidad.
Ahora el Gobierno lanza un nuevo sistema –Tu historia Tu derecho- buscando que desde cualquier computadora o desde un celular, los usuarios puedan acceder a prestaciones inéditas que dan mayor participación y seguridad sobre los servicios que se les brindan y pone en conocimiento directo de las autoridades sanitarias, lo que está ocurriendo o lo que se denuncia, sin excusa de desconocimiento.
Un servicio en defensa de los usuarios
Los usuarios pueden en primer término calificar la atención que recibió a nivel de médicos, servicios de farmacia, y de administración. También acceder a la lista de medicamentos que recibieron en los últimos tres meses, e incluso con anterioridad. Tendrán una lista a disposición permanente de los tratamientos en curso y anteriores.
Sobre una capacidad de procesamiento de 16 millones de datos, el sistema permitirá evaluar las “recetas electrónicas” –que se usan cada vez más- generando alertas por medicamentos no adecuados para el diagnóstico del paciente o que fueren incompatibles entre sí.
“Nuestro objetivo es que el médico vea al paciente, lo toque, lo revise en todo el sentido de la palabra. De manera que esta herramienta nos tiene que servir para ir evaluando a los médicos y tener un cuadro de cuánto están cuidando a los pacientes”, explicó el director del PAMI, el médico Luciano Di Césare, a Raúl Kollman del diario Página 12 de Buenos Aires.
“Tu historia Tu derecho” que se inicia priorizando atención y medicamentos, busca “a muy corto plazo”, sumar los estudios bioquímicos, radiografías, tomografías, ecografías y, finalmente, cada consulta médica.