La Nacion / El entretenimiento tiene bastantes alternativas en la Argentina: cine, teatro, fútbol, máquinas electrónicas, recitales, por mencionar los más habituales, pero están también los restaurantes simples o especializados, ya sea internacionales o regionales, los museos, las galerías de arte y otros más sofisticados como orquestas filarmónicas, ópera, cuartetos de cuerdas y muchos más, pero para cada gusto hay una oferta.
Las cifras económicas que corresponden a cada actividad de esparcimiento popular las podemos ver en el siguiente cuadro:
Los recitales, aun considerando la ubicación más popular de los mismos (campo), son los más caros con $ 272 por hora de permanencia (dos horas y media por recital), según cifras de 2014, pero la concurrencia a estos eventos no es muy frecuente, en promedio solo cada tres meses. Las cifras de ubicación cercanas al escenario para estos recitales llegan a los $5000 por entrada y aún mucho más para las ubicaciones VIP. También varían según el intérprete del recital.
En segundo lugar, aparecen las plateas de fútbol que salen el equivalente de $ 200 por hora según cifras de 2014, aunque la alternativa más barata es ir a "la popular", con un gasto de $ 45 por hora equivalente para ese año. Esta actividad tiene estimado un tiempo de permanencia de dos horas, dos veces por mes. Es la actividad más popular de la Argentina, aunque ahora presenta el problema de que no pueden concurrir los visitantes a cada partido, por el problema de la violencia de los barras, que han causado muchos disturbios e incluso la muerte de varios hinchas.
En tercer lugar, se ubican los juegos en las maquinas electrónicas, con un costo intermedio de $190 por hora, con un tiempo de permanencia en el lugar de dos horas por vez y una frecuencia quincenal. Esta actividad es muy elegida por vecinos y jubilados y está en muchas localidades del país.
El teatro es accesible también para muchos, ya que cuesta, según cifras del 2014, unos $ 160 por hora, y la gente va una vez por mes al teatro. Hay una oferta de teatro en la Argentina para todos los gustos.
Lo más económico en lo que a recreación popular se refiere es el cine, que cuesta $37 por hora de permanencia, que son dos horas por vez y la gente va al cine con una frecuencia quincenal, según cifras de 2014. El cine ha sufrido la competencia de las muy buenas series televisivas y de los sistemas de compra automática de películas por Internet, que le han producido una competencia fuerte.
Es llamativo el bajo gasto por persona y por vez en las máquinas electrónicas, pues la impresión en la opinión pública es que es mucho mayor el movimiento de dinero que hay en los bingos y que la gente gasta mucho allí, hasta incluso ser una perdición para muchas personas. De acuerdo a la información del sector, la sobrevaloración económica proviene de que estos juegos están pensados como un entretenimiento de unas dos horas y para que la permanencia jugando sea de esa extensión con un gasto pequeño al alcance de sectores populares, deben devolver en premios alrededor del 95% de lo jugado cada vez. Si fuera menor el porcentaje de premios, el entretenimiento duraría mucho menos, por ejemplo solo 10 o 15 minutos y nadie iría a los mismos.
Por este motivo una persona que gastó en promedio $190 por hora durante dos horas, como se registra en 2014, en realidad jugó por $ 1530. La cifra que se publica en los medios es la del total jugado, a la que se le deben restar los premios del 95% en promedio de lo jugado. Por lo tanto, el total jugado no es el total gastado por el concurrente, sino que esta cifra es 4 a 5 veces menor, pues el total jugado incluye los premios.
La explicación me pareció un poco difícil, pero es lógica y aclara bien el nuevo posicionamiento de los entretenimientos con máquinas electrónicas, que se desarrollaron en los Estados Unidos y ahora tienen mucha aceptación entre el público como una actividad popular. Personalmente prefiero la lectura, pero reconozco que no es muy social mi forma esparcimiento. .
Con Información de La Nacion