AMIA: Irán contradice a la Argentina por el pedido de capturas

Para la comunidad judía, quedaron en evidencia los límites del acuerdo

Por primera vez, Irán admitió ayer que, según su interpretación, el acuerdo que firmó con la Argentina para revisar la investigación del atentado a la AMIA hace caer las alertas rojas dispuestas por Interpol contra cinco iraníes acusados por la Justicia de participar en el ataque.

La agencia de noticias IRNA, órgano oficial de información del gobierno iraní, transmitió ayer declaraciones del canciller Ali Akbar Salehi en las que, a contramano de la posición adoptada por la Casa Rosada, plantea que el memorándum de entendimiento establece que Interpol debe eliminar las acusaciones contra las autoridades iraníes.

Según el cable de la agencia de noticias, Salehi "denunció la alegación hecha el viernes por Interpol", después de que el organismo internacional explicó que se mantenían las órdenes de captura internacional contra los iraníes.

La controversia se da apenas dos días después de que el canciller Héctor Timerman hizo pública una carta de Interpol en la que el organismo explicó que a partir del acuerdo firmado entre la Argentina e Irán se mantenía el actual estatus en las notificaciones rojas.

El tratado, que ratificó el Congreso, recibió un unánime rechazo de la oposición, que planteó justamente el riesgo que implicaba el punto séptimo del acuerdo, en el que ambos cancilleres se comprometían a informar a Interpol lo firmado. Ese punto hacía sospechar la posibilidad de que pudieran caer las circulares rojas que emitió Interpol ante el pedido del juez federal Rodolfo Canicoba Corral.

Timerman había convocado a una conferencia el viernes pasado en la Casa Rosada para exhibir una carta que le había enviado la Oficina de Asuntos Jurídicos de la Secretaría General de Interpol. En la misiva, el organismo internacional consideró "positivo" el acuerdo y en su segundo párrafo aclaró: "Dicho acuerdo no implica ningún tipo de cambio en el estatus de las notificaciones rojas publicadas en relación con los crímenes investigados en la causa AMIA".

Incluso la presidenta Cristina Kirchner dejó una serie de mensajes en Twitter, antes de partir a Roma, en los que se congració, ya en su rol de abogada, de haber estado segura de que las alertas rojas se mantenían. "No me sorprende, soy abogada", contó la jefa del Estado que le había dicho a Timerman apenas el funcionario le avisó de la aclaración de Interpol. "Pero no se trata de quién tiene la razón, siempre lo más importante es actuar de buena fe, con responsabilidad, sin oportunismos y con compromiso por la Verdad, Memoria y Justicia", escribió la Presidenta en Twitter.

El cable de IRNA con las declaraciones de Salehi despertó la automática reacción y las duras críticas contra el Gobierno de la comunidad judía (ver aparte).

El reglamento de Interpol, en su artículo 81, fija los procedimientos para dar de baja los pedidos de capturas internacionales. Allí establece que se dejarán sin efecto cuando "hayan logrado su finalidad", una vez que lo haya confirmado la propia oficina central del organismo o bien ante el pedido del juez que solicitó las alertas. En ese caso, sería Canicoba Corral el que debería pedir que se levantaran las capturas.

Según las declaraciones de Salehi que reproduce la agencia de noticias IRNA, su país "trabaja juntamente con el gobierno de la Argentina para resolver" el atentado.

Párrafo polémico

Manifestó también que, "según el acuerdo firmado por ambos países, la Interpol [policía internacional] debe eliminar las acusaciones contra las autoridades iraníes". Éste es el párrafo con el que la agencia oficial iraní contradice la carta que difundió Timerman.

Además, el cable no habla de cinco acusados, sino de cuatro, otro punto que ya había generado diferencias después de que el vocero de Salehi, Ramin Mehmanparast, excluyó al actual ministro de Defensa, Ahmad Vahidi, de los interrogatorios previstos en el memorándum.

Entonces, ante aquella diferencia en momentos en los que el Congreso debatía el acuerdo, el gobierno argentino logró que el propio canciller de Irán negara estas declaraciones, pero la duda se mantuvo.

Ayer, otra vez, aparecieron las diferencias. Con medio gabinete que viajó a Roma para la ceremonia de inicio del papado de Jorge Bergoglio y la diferencia horaria, hasta última hora de anoche la Casa Rosada guardó silencio ante la nueva controversia desatada con Irán..

Del editor: qué significa.
El entendimiento con Irán empieza a exhibir su fragilidad. Si los dos países firmantes interpretan cosas distintas, sólo se trata de un desacuerdo simulado