Ahora Gelman, defensor de los derechos humanos, duelo por su …

Juan Gelman, fallecido a sus 83 años, es velado en Ciudad de México con la presencia de amigos de la literatura. "El escritor sera cremado este jueves y todavía esta pendiente si los restos quedarán de manera definitiva en México o en Argentina o en algún otro lugar que (su viuda), Mara Lamadrid, decida", dijo a los medios María Inés Roqué, una amiga cercana a la familia del escritor.

Roqué señaló que se espera la llegada desde Uruguay de Macarena Gelman, la nieta del poeta. Gelman dedicó largos años de su vida a la búsqueda de Macarena, quien nació en cautividad después de que su madre embarazada fuera secuestrada por la dictadura argentina en 1976 y al fue entregada ilegalmente a un oficial policial uruguayo.

Finalmente en 2000 se descubrió la verdadera identidad de Macarena y el poeta pudo reunirse con ella."La familia está unida y con mucho amor y afecto de todos lados, viejos amigos y gente muy joven", comentó Roqué.

Al velorio de Gelman, ganador del premio Cervantes 2007, ya han hecho acto de presencia otros familiares y amigos escritores."Ante la muerte de Juan, las palabras guardaron un minuto de silencio", murmuró la escritora y periodista Cristina Pacheco, visiblemente conmovida.

Su viuda, Mara Lamadrid, a quien el escritor dedicó el aún inedito poemario "Amar a Mara", se refugiaba detras de grandes gafas oscuras y no hizo declaraciones a la prensa. También acudieron los poetas mexicanos Hugo Gutiérrez Vega, Eduardo Lizalde y Myriam Moscona y el escritor argentino Rolo Díez. Considerado uno de los poetas más brillantes en lengua española, Gelman falleció en su casa del barrio residencial La Condesa producto de una mielodisplasia, una enfermedad de la médula ósea.

El poeta, que se instaló hace 25 años en México tras exiliarse de su país por su militancia política, luchó hasta el final por encontrar justicia contra los responsables del asesinato de su hijo Marcelo, la desaparición de su nuera, María Claudia García, y el robo de su nieta.

Siguen las reacciones al fallecimiento de Juan Gelman. Organizaciones de derechos humanos de Uruguay lamentaron la muerte del poeta argentino Juan Gelman y ensalzaron la ardua lucha que le permitió hallar en 2000 con vida a su nieta Macarena, arrebatada a sus padres biológicos por los órganos represores de las dictaduras rioplatenses.

El vicepresidente de la Asociación de Ex Presos Políticos del Uruguay (Crysol), Waldemar Taroco, expresó la "estima y gran reconocimiento" de esta institución a Gelman, al que calificó de "gran luchador".

Para Taroco, la muerte en México a los 83 años de edad del poeta argentino, Premio Cervantes 2007 y Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana en 2005, es "una pérdida ireemplazable".

"Lo lamentamos mucho, lo sentimos mucho", agregó el activista, al recordar que Gelman fue en vida "un gran apoyo para Macarena", su nieta uruguaya.

Taroco lamentó que el literato "se muera sin saber el paradero de los restos de su nuera", María Claudia García, madre biológica de Macarena, que ahora tiene 37 años y hace apenas 14 conoció su verdadera identidad.

Nacida en 1976 en Montevideo, Macarena vivió durante 23 años pensando que era hija de un matrimonio uruguayo hasta que en 2000 Juan Gelman la localizó tras una denodada búsqueda de dos décadas.

Sus padres biológicos fueron en realidad los argentinos Marcelo Gelman, hijo del poeta, y María Claudia García, secuestrados ambos en Buenos Aires el 24 de agosto de 1976 y llevados a uno de los centros de detención clandestinos que funcionaron durante la dictadura militar en Argentina.

El tenía 20 años y ella, que estaba embarazada de siete meses, 19. Marcelo fue asesinado y su cadáver fue hallado en Buenos Aires, pero María Claudia fue trasladada a Uruguay como parte de la cooperación entre los regímenes militares uruguayo y argentino.

García desapareció tras dar a luz en cautiverio en Montevideo a Macarena, que siendo bebé fue entregada a un policía y su esposa en Montevideo.

El agente falleció antes de que su hija adoptiva supiera quién era.

Tras conocer la noticia de la muerte de su abuelo, Macarena viajó la pasada madrugada a Ciudad de México, donde él vivía desde hacía décadas, para asistir a su entierro, confirmó hoy a Efe una fuente diplomática en Montevideo.

En 2011 abuelo y nieta consiguieron que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH), con sede en Costa Rica, condenara por primera vez al Estado uruguayo por una causa de aquella época.

En una sentencia que levantó gran revuelo en Uruguay, la CorteIDH obligó al país a realizar una investigación sobre el llamado caso Gelman y localizar los "restos mortales" de María Claudia, algo que todavía no ha sido posible a día de hoy.

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