TEATRO-MONOLOGO
ACTRIZ SUIZA ISABELLE STOFFEL TRAE UNA PIEZA QUE ENSALZA LA SODOMIA
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Buenos Aires, 5 de agosto (Télam).- La actriz suiza Isabelle Stoffel, residente en España y actualmente en el Festival de Teatro de Edimburgo, Escocia, presentará en la Argentina la pieza "La rendición", sobre las memorias de la neoyorquina Toni Bentley.
El anuncio apareció en la prensa madrileña, según la cual Stoffel se propone sacudir al público con su monólogo, donde reinvidica esa práctica sexual como un acceso a la filosofía más intensa y a estados espirituales elevados.
La actriz irá primero a la sala Montaner, de Barcelona, para luego visitar Ciudad de México y Buenos Aires, donde espera desatar esa risa incómoda en el público, que le escucha decir: "Llegué a conocer a Dios por medio de la experiencia, dejándome follar por detrás, una y otra vez... Aprendo despacio, pero soy de un hedonismo voraz.
Su espectáculo no trata de otra cosa que de una encendida defensa sobre esa práctica sexual generalmente omitida en las conversaciones sociales, "todavía encerradas en grandes tabúes", dice la intérprete.
Entre la física y la mística, Stoffel encara la revelación de la penetración anal y la defiende en la versión que no deja de triunfar desde hace dos años en España y que sale de las memorias de la estadounidense Toni Bentley adaptadas por ella.
Según los españoles, "para decir lo que Stoffel dice en escena, además de sentido del humor, se requieren agallas para una actriz que aterrizó hace ocho años en España y que nunca ha dejado de trabajar tanto en cine como en teatro".
El sexo es un motor en mi vida -dice la actriz-, pero me resulta tremendamente difícil ponerle palabras al poder que transmite. Puede ser tan grave como la muerte, así que si no se le aplica ironía resulta un tema pesado, en `La rendición` encontré ese equilibrio.
En la sodomía, la confianza lo es todo: si te resistes, pueden hacerte daño de verdad. Pero una vez superado ese miedo, ¡qué placer tan grande encuentras! De ese modo he aprendido mucho, pero sobre todo una cosa: he aprendido a rendirme..., concluye.(Télam).-