A flote economía argentina pese a mares encrespados

04 de septiembre de 2015, 01:33Por Martin Hacthoun *

Buenos Aires (PL) El anuncio de nuevas inversiones extranjeras directas en Argentina reflejan la recuperación en la entrada y colocación de capitales durante este año en el país, elemento este clave para el continuado fomento de la industria y con ella de la economía.

Una de las políticas en las que viene insistiendo el gobierno de la presidenta Cristina Fernández es la implementación de medidas anticíclicas para evitar que la nueva fase de la crisis económica y financiera mundial afecte el país.

Esa línea de impermeabilización económica la sustenta básicamente con dar aliento a la industria nacional mediante inversiones del Estado y estimular la entrada de capitales extranjeros en sectores prioritarios, incentivar el valor agregado en la producción nacional, para así estimular las exportaciones.

A su vez, mantiene los controles y regulaciones sobre las divisas y los volúmenes de importaciones, y alienta el ahorro en la moneda nacional.

Esas políticas de resguardo e incentivo están dando frutos, y este 2015 marca la recuperación firme, entre otros alicientes económicos, de las inversiones extranjeras y nacionales después de 2011, consignó la Presidenta al dirigirse recientemente a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires en su aniversario 161.

Acorde con datos que aportó a los ejecutivos de la Bolsa de Comercio, la inversión real de los primeros siete meses del año aumentó en cuatro por ciento con respecto al mismo período del año anterior, alcanzando una nada desdeñable proporción del 20,2 por ciento del Producto Interno Bruto. En julio ese crecimiento fue de 4,4 puntos porcentuales, alza que estuvo precedida por una subida de 4,6 por ciento en el primer trimestre y de 3,3 en el segundo, lo que hace un total en los primeros siete meses del año de cuatro por ciento, destacó la consultora especializada en el tema de Orlando Ferreres, la cual citó la jefa de Estado.

Valorado en cifras corrientes, representa una inversión total equivalente a 51 mil 347 millones de dólares de enero a julio, destacó la Ejecutiva, quien acotó que ese saldo positivo acontece en medio de condiciones externas totalmente desfavorables.

En réplica a la crítica del titular de la Bolsa de Comercio de que faltan inversiones, la jefa de Estado le preguntó a la concurrencia si sabían a cuánto se redujo el flujo de capital hacia los países emergentes, y les respondió:

"Pasaron de 1,3 billones de dólares en 2013, a 0,9 billones en 2015. Y si la Reserva Federal de Estados Unidos decide aumentar las tasas, esto se va a agravar, porque se produce lo que se denomina vuelo hacia mercados de valor (fly to quality), precisamente, al centro de donde empezó la crisis, que después nos trasladaron a todos nosotros."

Una muestra reciente que ilustra la mejoría del ingreso de capitales en el país es el anuncio de la empresa AGCO, especializada en la producción y distribución de maquinaria agrícola, que invertirá 20 millones de dólares en su planta de General Rodríguez, en la provincia de Buenos Aires, para la producción de cosechadoras.

Desde 2013 cuando inició su producción en Argentina, AGCO fabrica tractores Massey Ferguson y Valtra, y ahora con la ampliación producirá cuatro tipos de cosechadoras (Clase V Híbrida; Clase VI, Clase VII y VIII Axiales).

La idea según se informó es no solo satisfacer el mercado interno sino también exportar al de países del cono sur. La primera cosechadora producida localmente saldrá de la fábrica en septiembre de 2016. Esta planta tiene una capacidad de tres mil 500 tractores y 300 cosechadoras por año.

En opinión de la Presidenta, Argentina necesita que cada cadena de producción pueda tener la mayor cantidad de eslabones radicados en el país y sobre todo fortalecer la industria nacional.

"Esto es clave para el valor agregado de la producción nacional, para seguir sosteniendo también el trabajo. Y para esto necesitamos, también, profundizar las políticas de inversión en materia de investigación, desarrollo, ciencia y tecnología que, como nunca, ningún otro gobierno ha hecho en Argentina", recalcó.

Otra muestra del apoyo gubernamental al sector empresarial nacional, en particular el pequeño, es la medida del Ministerio de Industria de respaldar 209 proyectos emprendedores que generaron una inversión de 29 millones de pesos (tres millones 152 mil dólares).

A esa iniciativa, la dependencia estatal destinó 23,7 millones de pesos (dos millones 576 mil dólares) para poner en marcha o fortalecer proyectos productivos de jóvenes empresarios y emprendedores de 16 provincias, en el marco de los programas de Acceso al Crédito y Competitividad e Incubar, este último dirigido a incentivar proyectos de jóvenes empresarios y potenciar la innovación.

El articulista Raúl Dellatorre señala que en un año signado por las expectativas del cambio de gobierno, con señales de nuevos desequilibrios financieros mundiales y anuncios de una prolongación de la recesión brasileña, la economía argentina vuelve a sorprender con un proceso de repunte de la inversión que ya cumplió siete meses.

En su discurso, la mandataria puntualizó los aspectos de las políticas públicas contracíclicas que impulsaron este resultado, destacando la contraposición entre lo hecho y las críticas de sectores opositores que, sin admitirlo, conducirían con sus propuestas a una recesión interna y a una mayor concentración económica.

La mandataria consignó que la petrolera estatal YPF aumentó las inversiones en el primer semestre -comparado con 2014- de ocho mil 845 a 12 mil 409 millones de pesos (de 961 millones 413 mil a casi mil 349 millones de dólares), para un alza de 40,3 por ciento. Aun cuando la puesta de capitales privados no creció a la par de ese comportamiento en el sector petrolero estatal por parte, de todas formas registró un ascenso, señaló Cristina Fernández, quien indicó que por eso considera "que la dicotomía de que lo público es malo y lo privado es bueno, o viceversa también, es equivocada."

El consumo es fundamental para alentar la inversión, porque todo inversor requiere que su producción tenga salida, sostuvo para argumentar las políticas del Gobierno de incentivar el poder adquisitivo de la población "porque cuando los argentinos comienzan a consumir, los industriales comienzan a producir", aseveró.

En ese sentido, criticó que todavía existe "el problema de que la tasa de inversión y el riesgo que toman nuestros empresarios no es del ritmo que debería tener para acompañar lo que hace el Estado en materia de políticas públicas."

Así, la Presidenta explicó el enfoque de sus políticas económicas a los inversores bursátiles, que adscriben usualmente a las propuestas de mercados sin intervención estatal, señala el comentarista Dellatorre.

Y esas líneas son, por ejemplo, la creciente inversión de YPF en manos del Estado (frente a la inmovilidad privada por la baja del precio mundial del petróleo), la política oficial de aliento al mercado interno creando oportunidades de negocios para los privados, captar el reflujo de los capitales internacionales que optan por abandonar los países emergentes, y la inversión pública en el desarrollo científico tecnológico como sustento a la densidad industrial, enumera Dellatorre.

Por grandes rubros, la consultora Ferreres indica que en Construcción el crecimiento interanual para el mes de julio fue del 3,7 por ciento, pero el incremento es aún mayor cuando se compara la inversión acumulada en los primeros siete meses de cada año: 4,8 por ciento.

Para el otro gran acápite de la inversión, el correspondiente a Maquinaria y Equipo durable de producción, se observa en cambio un crecimiento más acelerado en julio (5,9 por ciento respecto del año pasado) que en la medición acumulada para los siete primeros meses (2,2 por ciento de aumento).

Dellatorre argumenta que luego de tres años de evolución entre negativa o levemente positiva, con una caída del cuatro por ciento en 2012, un repunte de apenas 1,8 por ciento en 2013, para caer de nuevo 3,6 en 2014, los datos de 2015 son promisorios y, en buena parte, las consecuencias de políticas que buscaron sostener el mercado interno aún en un contexto global marcadamente desfavorable.

Sobre el temor de que la crisis financiera que golpea a regiones del mundo contagie a la economía argentina, el presidente de la Comisión Nacional de Valores (CNV), Cristian Girard, considera que "hoy el mercado local está más cerca de la economía real".

A su juicio, la política de liberar al país del inmenso desendeudamiento de los sectores públicos y privados que lo maniató, evitó que los actuales vaivenes globales afecten con dureza el desenvolvimiento económico local.

Girard dijo en entrevista a Página 12 que ese resultado se debe a las políticas orientadas a aplicar la liquidez del sistema a fines productivos en particular, en estimular a la pequeña y mediana empresa, y esto aleja la posibilidad del contagio.

"La plaza local está desacoplada de los vaivenes internacionales debido a un sector público y privado muy desendeudado, con lo que no hay riesgo de sobreexposición", explica y agrega: "Estamos desacoplados también del efecto de los capitales golondrinas, y eso tiene que ver con la decisión en 2005 de encajar el ingreso de capitales especulativos. Es parte también de la administración de las reservas".

Los capitales golondrina son un problema y un mal que se ha acentuado con la globalización, y que tiene un gran efecto negativo en la economía de cualquier país. Ese término identifica al capital pasajero que llega a un mercado permanece por un corto tiempo y luego sale nuevamente.

Eso sucede cuando por ciertas coyunturas y circunstancias un país ofrece incentivos y buena rentabilidad a los capitales externos, por tanto llegan para aprovechar dicha oportunidad y una vez que se benefician vuelan a buscar otro mercado que les brinde una posibilidad mejor, una ganancia mayor.

*Corresponsal de Prensa Latina en Argentina.

arb/mh

Leave a Reply