La Razon / Si hay algo que marcó a los octavos de final del Mundial de Brasil fue la paridad en casi todas sus llaves. Como le sucedió ayer a Alemania y hoy a la Argentina, la selección de Bélgica también necesitó del alargue para sacarse de encima a un complicado Estados Unidos y clasificarse a cuartos, donde se medirá con el conjunto albiceleste.
Tras igualar sin goles en los 90 minutos, los "Diablos Rojos" se impusieron 2−1 en la prorroga. Kevin De Bruyne y Romelu Lukaku, a los 2 y 14 minutos del primer tiempo del alargue, pusieron en ventaja al elenco belga en el estadio Arena Fonte Nova, que a esa altura parecía tener allanado el camino hacia una nueva instancia.
Sin embargo, a los dos minutos del segundo tiempo del alargue apareció Julian Green por el centro del área y anotó el descuento estadounidense con una volea que batió a Thibaut Courtois, aunque finalmente no alcanzó.
Después de 24 años, belgas y argentinos volverán a verse en un Mundial. Esta vez será el próximo sábado a las 13, en Brasilia. El último antecedente fue en México 86, cuando el conjunto nacional se impuso 2−0 en semifinales con dos tantos de Maradona.
Aquel partido, aquel Mundial, fue el de Maradona como ahora puede ser el de Messi, vital hoy con la asistencia de gol que dio el triunfo por 1−0 a la albiceleste ante Suiza.
En el Arena Fonte Nova, tanto belgas como norteamericanos tuvieron sus chances en los 90 minutos reglamentarios, pero el conjunto estadounidense −que dirige el alemán Jurgen Klinsmann− dispuso de la posibilidad inmejorable de liquidar la serie sobre el cierre de ese lapso aunque Chris Wondolowski, en absoluta soledad dentro del área, remató por encima del travesaño.
Pegó primero en el tiempo suplementario el conjunto belga, ganador del Grupo H y que tuvo una notable mejoría en su juego tras el ingreso de Lukaku en el comienzo del tiempo suplementario. Fue precisamente el delantero de Everton de Inglaterra quien encabezó el desborde por derecha que acabó con el rodeo de De Bruyne en el área y el posterior derechazo cruzado para abrir el marcador.
Sobre el cierre de esa primera mitad, Lukaku definió de primera entrando al área y pareció cerrar la llave en favor de Bélgica. Pero en el principio del último episodio del alargue apareció Green y le puso suspenso al partido hasta el final, aunque Estados Unidos no logró volver a doblegar la resistencia de un elenco belga que en ese período mostró algunas carencias defensivas.
Con Información de La Razon